El juzgamiento del añismo y el respeto al debido proceso

El país conoció como “golpe de Estado dos” el proceso por los actos de ejercicio del poder desde su toma a pesar de la ilegalidad de la aplicación de la sucesión presidencial, el quebrantamiento del orden constitucional y la interrupción democrática en el país. Ello nos permite concluir en dos verdades ante el pueblo boliviano: el ejercicio pleno del debido proceso y el descarte de la tesis del juicio de responsabilidades.


 
La esperanza de la Medicina Nuclear

La Paz, 31 de mayo de 2022.- El pasado 6 de marzo de la presente gestión, en la ciudad de El Alto, fue inaugurado el primer Centro de Medicina Nuclear y Radioterapia de nuestro Estado Plurinacional de Bolivia, enfocado en el tratamiento de los distintos tipos de cáncer y con un presupuesto cercano a los 40 millones de dólares americanos. Dicha inauguración contó con la presencia de la Asociación de Pacientes con Cáncer, grupo de personas y familiares que, por cierto, llevan años peregrinando por una adecuada y, sobretodo, eficiente atención de sus enfermos.

El cáncer a nivel mundial, se convierte en la segunda causa de muerte entre todas las enfermedades y según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), durante el 2021, se estima que 20 millones de personas fueron diagnosticadas con cáncer y alrededor de 10 millones de personas murieron a manos de esta enfermedad.

En Latinoamérica, durante el 2020, se estima que 4 millones de personas fueron diagnosticadas con cáncer y 1,4 millones de personas murieron bajo sus efectos. La OMS identifica también que los tipos de cáncer más comunes son: el cáncer de mama, de pulmón, de recto, y de próstata; señalando como principales causas: el excesivo consumo de tabaco y alcohol, la mala alimentación reflejada en los niveles de obesidad o el bajo consumo de verduras y frutas, y una carente actividad física.

La proyección para Latinoamérica establece que para el 2040, los casos se incrementarán en 30 millones y afectará principalmente a países de ingresos bajos y medianos.

En Bolivia, el promedio de nuevos casos que se registran por año, asciende a 16.000; de los cuales, los tipos más comunes son: cáncer de cuello uterino, de próstata, cáncer de mama, siendo las mujeres, lamentablemente, el grupo más afectado. Por ejemplo, en el caso del cáncer de cuello uterino, Bolivia tiene una tasa de 26,3 por cada 100.000 mujeres, siendo los departamentos de Oruro y Potosí, los que registran las tasas más altas, 93,5 y 60,9 por cada mil mujeres, respectivamente. Por otro lado, el rango de edad más afectado en este grupo etario, se encuentra entre los 25 y los 45 años, siendo un dato por demás desalentador, la muerte de casi cinco mujeres al día, a raíz de este tipo de cáncer. 

El Centro de Medicina Nuclear y Radioterapia cuenta con un área de Radioterapia y un área de Oncología Clínica y Quimioterapia Ambulatoria; la primera cuenta con dos aceleradores lineales (un equipo de braquiterapia y un tomógrafo simulador); el área de Oncología tiene ocho consultorios para la atención de pacientes oncológicos. Al respecto, según datos presentados en su inauguración, este centro presenta una capacidad de atención de 120 personas al día y cerca de 36.000 al año.

Hasta la primera quincena de este mes (mayo), el Centro de Medicina Nuclear y Radioterapia ha realizado la atención de alrededor 1.300 pacientes, de los cuales el 80% pertenece al Seguro Único de Salud (SUS), esperando que este porcentaje se vaya incrementando con el tiempo, a través de los convenios que se vienen gestionando y firmando con las diferentes cajas aseguradoras de nuestro país.

Con seguridad falta mucho camino por recorrer en torno a la lucha contra el cáncer y con seguridad será un camino espinoso, pero, después de muchos años de olvido, se ha dado un paso relevante, pues este moderno centro, coloca a Bolivia entre los países referentes con mayor tecnología asociado al servicio del tratamiento del cáncer, pero, por sobretodo genera un espacio de esperanza en la población afectada y la población en general, por los impactos positivos que puede generar en el mediano y largo plazo. Los datos presentados en este artículo, son bastante duros, pero cumplen la función de convertirse en línea base, para que muy pronto puedan ser nuevamente evaluados.

Definitivamente, es un gran logro en el sector salud de Bolivia, la esperanza de la medicina nuclear es una realidad.  

 

 


Sandino en la Calle de las Brujas

La Paz, 17 de mayo de 2022 (ABI).- Cuenta la historia que cuando Ernesto “Che” Guevara llegó a Bolivia, allá por el año 1967, no sólo se alojó con una identidad falsa en el hotel Copacabana y comió en Elis del Prado. Sino que también visitó los principales barrios de comercio popular de nuestra ciudad de La Paz, quedando encantado con la cultura boliviana. Dejó constancia de su visita adquiriendo una clásica cachucha propia del sindicalista boliviano de la época. 


Aumento salarial, un derecho de vida

“Sobre la base del intercambio de mercancías, el primer supuesto era que el capitalista y el obrero se enfrentaran como personas libres, como propietarios independientes de mercancías: el uno en cuanto poseedor de dinero y medios de producción, el otro como poseedor de fuerza de trabajo. Pero ahora el capital adquiere personas que total o parcialmente se hallan en estado de minoridad”, Karl Marx.

Se ha hablado mucho del aumento salarial, el cual va directamente a favor de los empleados públicos y privados. El fin de esta medida es nivelar el poder adquisitivo de los trabajadores, ya que la canasta familiar ha tenido incrementos. Por ejemplo, el litro de aceite de 10 bolivianos ha llegado a 13,50 bolivianos, el azúcar pasó de 5 a 6 bolivianos, entre otros productos que han sufrido elevación en el precio. En cambio, el salario del trabajador está estancado desde 2019.

La excusa de la parte privada para no efectivizar el aumento salarial –de 3% para el haber básico y 4% para el Salario Mínimo Nacional– es que la economía está detenida por la pandemia (la vieja-nueva confiable excusa). Sin embargo, si se analiza con cuidado, existe acepción de que en la cuarentena rígida las familias bolivianas siguieron con el consumo, porque tenían que alimentarse.

Los proveedores distribuían con normalidad a los supermercados, los primeros en ser beneficiados con horarios de atención. Luego se favoreció a los centros de abasto, lo que demuestra que las industrias cárnicas, cerealeras, aceiteras y otras continuaron con sus ganancias.

Otro sector que no paró fue el de los exportadores, quienes lograron buenos resultados, no como se esperaba, pero la demanda mundial y la banda de precios los favoreció en la exportación de mercancías tradicionales y no tradicionales, así el 2021 lograron superávit.

Ahora, ¿cuál es la excusa para no nivelar los salarios de trabajadores y trabajadoras? Estos, tanto como los empresarios, necesitan recuperar sus bajos ingresos en la pandemia. Trabajadores y trabajadoras ya no pueden amarrarse más los pantalones y seguir con los efectos en sus espaldas.

El 27 de abril, luego de intensas negociaciones durante varias jornadas, la Central Obrera Boliviana (COB) y el Gobierno acordaron el aumento salarial, que fue anunciado por el presidente del Estado, Luis Arce Catacora, en la Casa Grande del Pueblo.

El Gobierno nacional dispuso aumento salarial del 3% para el haber básico, como base de negociación para el sector privado. En tanto, en el sector público el incremento solo llegará a los sectores de Salud y Educación. Adicionalmente, se aprobó aumento del 4% para el Salario Mínimo Nacional, es decir, de 2.164 bolivianos sube a 2.250 bolivianos.

Según el decreto, las empresas públicas y las empresas en las cuales el Estado tiene mayoría accionaria deben regirse a los lineamientos establecidos.

El incremento salarial es una medida social a favor del grupo que carga la crisis: la clase obrera, que aguantar el alza de precios en la canasta familiar y recibir el reproche de los empresarios, quienes fueron favorecidos con leyes laborales en la cuarentena, así despidieron a muchos trabajadores y recontrataron con la mitad del salario.

Ahora es tiempo de favorecer a los olvidados y olvidadas, quienes mantienen la economía y aportan cada día al crecimiento y la recuperación económica del país, además, entregan sus capacidades para beneficio de las empresas.


Política salarial en el nuevo modelo económico boliviano

Desde 1985, la política económica respondía a un programa dirigido a frenar la inflación, por cuanto, se implementaron reformas estructurales de significativa magnitud, diseñadas a la par del consenso de Washington para abrir discriminadamente los mercados. El gobierno neoliberal debía derrotar a la opositora organización de los trabajadores, utilizando todos los medios represivos a su alcance, sometiendo a la clase obrera a un programa económico que tuvo como objetivo inicial, una drástica caída de los ingresos de los trabajadores y la liquidación de los recursos de defensa del poder del sindicalismo nacional.


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