La Asociación de víctimas, fallecidos, heridos, procesados y perseguidos en la Defensa de la Democracia de Huayllani, Sacaba, inició este lunes una marcha que pretende llegar hasta la ciudad de La Paz en demanda de justicia por las muertes de 2019 y las vulneraciones a derechos humanos que cometió el gobierno de facto de Jeanine Áñez.

“En este lugar, (tranca de Huayllani) nos han disparado; en este lugar, han matado. Ahora, nuevamente, estamos en las calles; ahora, nuevamente, estamos de pie y vamos a luchar hasta las últimas consecuencias, hasta encontrar justicia”, reclamó el vicepresidente de la asociación, Roberto Jucumari, en entrevista con Red Patria Nueva.

Con la tricolor y la wiphala en mano, hombres y mujeres, quienes sufrieron por la masacre de Sacaba iniciaron una marcha simbólica hasta el sector denominado “Pepsi”, donde abordarán vehículos para viajar hasta Caracollo, Oruro, donde se reunirán con las víctimas de la Masacre de Senkata. El objetivo es llegar en conjunto a La Paz exigiendo justicia y cárcel para los autores de las masacres de 2019.

“Ha tenido valor para matar, de una vez que salga la sentencia de 30 años para la señora Jeanine Áñez”, protestó Jucumari.

El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI-Bolivia) presentó en agosto los resultados de las investigaciones sobre hechos violencia ocurridos tras el golpe de Estado.

El documento concluye que el 15 de noviembre de 2019 en Sacaba, Cochabamba, y el 19 de noviembre de ese año en Senkata, El Alto, existió, durante el régimen de Áñez, vulneración a los derechos humanos, masacres con armas letales utilizadas por las fuerzas de seguridad y ejecuciones sumarias.

Áñez se encuentra con detención preventiva desde marzo de 2021 en La Paz por la presunta comisión de los delitos de sedición, conspiración y terrorismo en 2019.

La ministra de Trabajo, Verónica Navia, afirmó este lunes que el Gobierno escucha al pueblo y recibe sus propuestas para la reactivación económica y productiva de Bolivia.

“Una pandemia mal administrada por un gobierno golpista ha llevado a la crisis a un extremo. Pero la COB (Central Obrera Boliviana), muy consecuente con su representatividad, ha pedido a nuestro presidente Luis Arce, convocar a esta Cumbre para la Reconstrucción Económica y Productiva”, dijo Navia, citada en un boletín institucional.

La autoridad consideró que fue muy atinado de parte del Presidente aceptar la realización de este evento, después de haberse realizado las cumbres para la Reconstrucción Económica y Productiva en los nueve departamentos del país “escuchando a la gente, escuchando a las trabajadoras y a los trabajadores de base, precisamente sus propuestas para salir de esta crisis”.

Navia agregó que todas las autoridades nacionales, departamentales y municipales que les interesa el país han sido bienvenidas en las cumbres departamentales.

“Todas las organizaciones sociales que desean salir de la crisis han estado presentes en las cumbres departamentales y ahora también están en esta cumbre nacional, que no es más que el cierre de una etapa para recibir propuestas, para pasar de la propuesta a la gestión”, señaló.

El ministro de Educación, Adrián Quelca Tarqui, destacó este lunes la recuperación de la democracia, hace un año, y a través de ello también se recobró la educación para el pueblo boliviano.

“Queremos saludar al valiente pueblo boliviano que hace un año emitió su veredicto, la voluntad del pueblo boliviano se tradujo en una votación de 55 por ciento a favor del binomio Luis Arce Catacora y David Choquehuanca, presidente y vicepresidente del Estado Plurinacional”, expresó Quelca, citado en un boletín institucional..

Dijo además que se debe celebrar esta victoria del pueblo porque con esas acciones se posibilitaran avances cuantitativos, cualitativos, económicos y sociales.

“Estamos empeñados en la reconstrucción económica y productiva del país, desde el Ministerio de Educación estamos trabajando por la educación y para lograr un retorno seguro a clases”, agregó.

Solicitó a los bolivianos acudir a los centros de vacunación para recibir la dosis de esperanza y combatir el COVID-19 con el propósito de continuar con la reconstrucción del país y la recuperación de la educación.

El embajador de Argentina en Bolivia, Ariel Basteiro, resaltó este lunes la recuperación de la democracia en el país, hace un año, tras la lucha del pueblo boliviano ante el golpe de Estado del 2019 ejecutado por la “derecha boliviana”.

“Hoy, se cumple un año del triunfo de Luis Arce Catacora en las elecciones que tuvieron que darse después de que el pueblo boliviano las reclamara, se movilizará pidiendo la recuperación de la democracia, que fue arrebatada en el golpe de Estado en noviembre del 2019, que llevó adelante la derecha boliviana”, dijo a los periodistas.

El 18 de octubre de 2020, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) realizó las elecciones nacionales en Bolivia para elegir a los primeros mandatarios, Presidente y Vicepresidente, además de asambleístas de los nueve departamentos, para recuperar la democracia, dando la victoria al Movimiento al Socialismo (MAS) con el 55% de votación.

Basteiro dijo que esta fecha es para festejar, recordar y hacer un balance; pese a que la situación es complicada, porque la pandemia modificó sustancialmente los proyectos y planes de Gobierno, no solo para Bolivia; sino para todos los gobiernos de la región.

“Es una fecha que va a quedar en la historia de Bolivia, toda vez que el pueblo boliviano pudo recuperar su democracia, su gobierno popular a partir de no bajar los brazos”, resaltó.

En criterio del diplomático, la pandemia influyó para demorar en la recuperación de la economía, en el cual los gobiernos vienen trabajando.

Destacó la relación “privilegiada” entre los mandatarios Alberto Fernández de Argentina y Luis Arce Catacora de Bolivia; también con los exmandatarios y actuales referentes políticos, Evo Morales y Álvaro García Linera, a quienes ayudaron a salir con vida en noviembre del 2019, ante un posible magnicidio, cuando se dio el golpe de Estado por el régimen de Jeanine Áñez.

Anunció que en noviembre, el presidente de Bolivia, Luis Arce, realizará una visita oficial a su similar de Argentina, Alberto Fernández, hecho que ratificará las buena relaciones entre ambos países.