Las reclusas del Centro Penitenciario de Miraflores emitieron este martes un voto resolutivo que pide un trato igualitario y la eliminación de los privilegios que tiene la expresidenta de facto, Jeanine Áñez, durante su detención preventiva por el caso golpe de Estado.
“No sólo se estén preocupando por la señora Áñez, que se recuerden que somos 52 señoras privadas de libertad con los mismos derechos, las mismas obligaciones. Pedimos trato igualitario sin privilegios para nadie, porque todas somos iguales ante la Ley y merecemos el mismo trato y respeto, sea cual sea nuestra posición social, profesión. No merecemos este trato desigual que estamos recibiendo (sic)”, menciona el documento firmado por las reclusas.
El documento está dirigido al director nacional de Régimen Penitenciario, Juan Carlos Limpias; al director departamental de Régimen Penitenciario de La Paz, Franz Laura; a la defensora del Pueblo, Nadia Cruz; y a representantes de las instituciones de defensa de los derechos humanos.
El voto resolutivo solicita, además, que las autoridades penitenciarias vean la forma de que el centro de reclusión vuelva a la normalidad que tenía antes de la llegada de la exmandataria.
Entre los perjuicios que provocan los privilegios de Áñez, las privadas de libertad recuerdan que dejaron de contar con el acceso a su consultorio médico, porque fue destinado al cuidado de la exautoridad.
“Todas tenemos problemas diferentes. Hace dos años pedimos auxilio al Gobierno, que por humanidad considere nuestra condición de mujeres, pero la señora no se tocó el corazón para ayudarnos en su gobierno”, agregan en su texto.
Las privadas de libertad recuerdan en el documento que ellas también son mujeres, madres e hijas que padecen depresión severa, diabetes, cáncer, hipertensión arterial y migraña, entre otras dolencias, pero que “no hacen tanto escándalo por ello” como sucede con el estado de salud de Áñez.
Además, mencionan sentirse indignadas por las mentiras que se dice mediante los medios de comunicación respecto a que la exmandataria no recibe visitas ni tiene privilegios, que vive en precarias condiciones y que recibe daño psicológico.
“Nosotras somos las que estamos sufriendo daño psicológico por parte de sus seguidores que gritan mentiras a las puertas del Centro Penitenciario Femenino de Miraflores. Nosotras somos las que desde hace 18 meses no tenemos visita”, reclaman en el texto.
Además, las privadas de libertad detallan en el voto resolutivo que están molestas porque su diario vivir fue alterado por el escándalo que los seguidores de Áñez realizan en las puertas del penal para pedir su liberación, puesto que perjudica su convivencia pacífica y daña su estado de salud psicológico.
