El ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, aplaudió el propósito del movimiento talibán* (proscrito en Rusia) de mantener conversaciones con las otras fuerzas políticas de Afganistán.

"Saludamos las declaraciones de los talibanes de que quieren dialogar con las otras fuerzas políticas de Afganistán", dijo Lavrov en una rueda de prensa tras una reunión con la canciller del Gobierno de Unidad Nacional de Libia, Najla Mangoush.

El jefe de la diplomacia rusa precisó que se había anunciado ya un encuentro en el que participarían el jefe del Consejo para la Reconciliación Nacional, Abdulá Abdulá, el expresidente Hamid Karzai y el líder del partido islámico Hezb-e-Islami, Gulbuddin Hekmatyar.

Moscú, añadió, promoverá el diálogo entre los distintos bandos y buscará que se traduzca en hechos concretos.

Lavrov ofreció también reactivar la mesa de diálogo de Moscú que involucraba a representantes de los cinco países centroasiáticos, China, Estados Unidos, la India, Irán, Pakistán, Rusia y los bandos beligerantes afganos.

"De momento no hemos hecho una propuesta oficial, pero la eficacia de este formato que acompañaba las negociaciones afganas era reconocida por todos y estamos dispuestos a relanzarlo si se considera necesario", consignó.

El ministro ruso lamentó que el presidente afgano, Ashraf Ghani, no se esforzara para cumplir los acuerdos alcanzados con los talibanes.

"Pasó lo que pasó. Cuando los políticos no pueden trabajar con eficiencia, aumenta la tentación de resolver el problema por la fuerza", enfatizó.

El 15 de agosto, el movimiento talibán* (proscrito en Rusia) tomó la capital afgana precipitando la caída del Gobierno del presidente Ashraf Ghani que era apoyado por Estados Unidos y otros países de la OTAN.

Los insurgentes buscan ahora el "traspaso completo" del poder, y ya anunciaron un diálogo nacional para formar "un gobierno transparente, inclusivo e islámico".

La caída de Ghani se produjo a dos semanas de la retirada completa de las tropas estadounidenses del país centroasiático tras casi dos décadas de intervención.

Las fuerzas norteamericanas y sus aliados de la OTAN invadieron Afganistán en 2001 con el argumento de la lucha contra el terrorismo.

El Barómetro sobre el Comercio de Mercancías de la Organización Mundial del Comercio (OMC) registró este martes su nuevo máximo histórico, lo que evidencia que el comercio mundial de mercancías se recupera tras ser afectado por la pandemia del COVID-19.

"Según el Barómetro sobre el Comercio de Mercancías de la OMC, que alcanzó un máximo sin precedentes en su última lectura publicada el 18 de agosto, el comercio mundial de mercancías sigue recuperándose con fuerza de la crisis causada por la pandemia del COVID-19", dice un comunicado de la entidad.

Precisa que actualmente el índice se sitúa en 110,4 puntos —cifra récord desde que el barómetro fue lanzado por primera vez en julio de 2016— y representa un incremento interanual de 20 puntos.

Todos los subíndices que componen el Barómetro sobre el Comercio de Mercancías se han mantenido por encima de la tendencia en el último mes, señala la nota.

"En particular, los índices de carga aérea (114,0), transporte de contenedores (110,8) y materias primas (104,7) siguieron en aumento, mostrando un crecimiento comercial más rápido que el promedio", indica el texto.

La OMC subraya que el crecimiento del índice de carga aérea es fruto de la relajación de medidas restrictivas anticovid impuestas por varios países sobre viajes al extranjero durante la pandemia.

Sin embargo, el indicador puede volver a crecer, si los estados reimponen las restricciones debido a la propagación de las nuevas variantes del coronavirus.

"El comercio mundial de mercancías ha crecido constantemente desde que experimentó una fuerte caída en el segundo trimestre de 2020 durante los primeros días de la pandemia", explica la OMC.

Agregó que el volumen del comercio de mercancías aumentó un 5,7% en términos interanuales en el primer trimestre de este año, su mayor subida desde el aumento de un 5,8% en el tercer trimestre de 2011.

Sin embargo, de momento el futuro del comercio de mercancías sigue siendo afectado por muchos factores de riesgo, incluidas disparidades regionales, el estado débil del comercio de servicios, campañas de vacunación anticovid retrasadas y, por supuesto, la propagación del propio coronavirus y sus nuevas variantes.

China considera prematuro hablar sobre la posibilidad de reconocer a un nuevo Gobierno de Afganistán antes de su formación, declaró el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Zhao Lijian.

"La posición de China sobre el tema afgano siempre ha sido coherente y clara (...) para el reconocimiento del Gobierno, en primer lugar, hay que esperar su formación", dijo Zhao ante la prensa.

El portavoz señaló que será posible examinar el tema del reconocimiento diplomático si en Afganistán se establece un régimen abierto e inclusivo, con una amplia representación de varios partidos.

Sin embargo, según el diplomático, China "en la medida de sus posibilidades" ayudará en el proceso de reconstrucción social y económica de Afganistán.

La política de China respecto a Afganistán siempre ha sido amistosa, añadió.

"China espera que todas las partes en Afganistán puedan solucionar sus diferencias mediante diálogo y consultas, evitar nuevas guerras, prevenir desastres humanitarios y facilitar una transición gradual en el país", concluyó.

Del 6 al 14 de agosto, el movimiento talibán (prohibido en Rusia) se hizo con el control de todas las capitales provinciales y el día 15 entró en Kabul, tomando el poder en la ciudad y, como aseguró más tarde, todo el país.

La ofensiva de los islamistas rebeldes contra las tropas gubernamentales concluyó dos semanas antes de finalizar la retirada de Estados Unidos y sus aliados, tras dos décadas de presencia militar en Afganistán.

El presidente afgano, Ashraf Ghani, abandonó el país. Los talibanes afirmaron que aspiran a un "traspaso completo" del poder, y a la vez aseveraron que en los próximos días sostendrían negociaciones nacionales para formar "un gobierno transparente, inclusivo e islámico".

Foto: RT

El colapso en el aeropuerto de Kabul, que provocó víctimas mortales entre los afganos, se debió a los intentos de Estados Unidos de evacuar a sus diplomáticos, declaró la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova.

"El colapso que se vive durante más de un día en el aeropuerto de Kabul no se debe a su incapacidad de recibir aviones. Todo empezó cuando EEUU, al enviar un contingente militar adicional para ayudar a evacuar a sus diplomáticos, estorbó el funcionamiento del aeropuerto. Fue entonces cuando empezó el colapso", subrayó la diplomática al intervenir en el espacio televisivo Soloviov Live.

Redes sociales y canales de televisión mundiales transmitieron imágenes de los afganos corriendo al lado de un avión en despegue, se agarran a su chasis y su fuselaje y después caen desde una altura grande, según unas secuencias.

La situación se agravó en Afganistán durante las últimas semanas, a causa de la ofensiva lanzada por el movimiento talibán (calificado de terrorista y proscrito en Rusia) contra las ciudades grandes del país. El domingo, 15 de agosto, trascendió que los insurgentes estaban controlando los pasos fronterizos y más tarde llegó la información de que entraron en Kabul y tomaron el palacio presidencial.

El presidente afgano, Ashraf Ghani, abandonó el país "para prevenir una masacre", según su declaración.

El portavoz de la oficina política del Talibán, Mohammad Naim, anunció el 15 de agosto que la guerra en Afganistán ha terminado y que la forma del gobierno del país se aclarará próximamente.

Los talibanes están controlando todos los pasos fronterizos. La evacuación del personal de las misiones extranjeras y de sus colaboradores afganos se efectúa a través del aeropuerto de Kabul, el único que se controla por Estados Unidos y otros países de la OTAN.