La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) instalará gas domiciliario para aproximadamente 6.000 beneficiarios en 10 municipios de Cochabamba, resultado del sorteo de 20 lotes de trabajo realizado en el marco del plan de reactivación económica impulsado por el Gobierno nacional. 

Del sorteo participaron una Notaria de Fe Pública, una representante de la Dirección de Transparencia Corporativa de YPFB y veedores de las empresas instaladoras de Cochabamba (Aceigas y Aigas), según informa un comunicado de la entidad.

Como en anteriores ocasiones, la actividad se transmitió en directo para las empresas acreditadas, a través de una cuenta institucional en la plataforma Webex y quedó registrada en un video con el propósito de transparentar la asignación de trabajos a las empresas contratistas.

Con este sorteo, se habilitarán 1.190 medidores distribuidos de la siguiente manera: en el municipio de Cercado se instalarán 568 conexiones, la población de Isarsama se favorecerá con 212, Entre Ríos con 33 y Sacaba con 177. 

Así, también se asignó la conexión de 41 medidores a Shinaota, 20 a Chipiriri en el municipio de Villa Tunari y 11 a Tiraque. Hacia la región del Valle Bajo cochabambino, en Tiquipaya, se construirá 51 acometidas, otras 52 en Capinota y 25 en Quillacollo. 

Estos sorteos son realizados periódicamente en todas las oficinas regionales de la Gerencia de Redes de Gas y Ductos (denominadas distritos). De esta manera, YPFB dinamiza la economía y genera fuentes de empleo directos e indirectos con la contratación de empresas que prestan servicios para cumplir con el mandato gubernamental de dotar gas a los bolivianos.

El ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, aseguró este domingo que, gracias a las políticas nacionales instruidas por el presidente Luis Arce Catacora para reactivar el sector hidrocarburífero, se logró incrementar la producción de gas de 43 millones de metros cúbicos día (MMmcd) a 47 MMmcd para la gestión 2021.

“En la gestión 2020, producto de las malas decisiones e incapacidad del gobierno de facto, se dio una caída en toda la cadena productiva de los hidrocarburos, de 52 MMmcd a 43 MMmcd, que provocó el desabastecimiento interno de gasolina, GLP, diésel oíl, causando largas filas por parte de la población en las estaciones de servicio”, dijo.

Dijo que otro aspecto de la pésima administración de Jeanine Áñez fue la paralización de los distintos proyectos exploratorios y producción de gas y líquidos, así como el perjuicio a la Planta de Amoniaco y Urea que causó un daño económico de más de $us 428 millones para el país.

“En lo que se refiere a la exportación de gas al Brasil, provocaron un daño económico al Estado de alrededor de 70 millones de dólares por año, al no incluir los costos de transporte de gas en la octava adenda firmada en marzo de 2020 entre YPFB y Petrobras; además de eso, aceptaron la invocación de fuerza mayor interpuesta por Petrobras para disminuir los volúmenes de venta de gas natural al mínimo contractual, provocando una pérdida de ingresos para el Estado durante casi cinco meses”, explicó Molina.

Una vez restablecida la democracia en el país, dijo, lo primero que se hizo fue garantizar el abastecimiento de combustibles, además de optimizar el uso de gas natural en el mercado interno y maximizar las exportaciones en el marco de los contratos firmados con Brasil y Argentina.

Otra importante medida asumida por el actual gobierno fue lograr la disminución del consumo de gas natural en las plantas termoeléctricas en 1 MMmcd, lo que significa, un logro que responde a la nueva política de diversificación de la matriz energética hacia la generación de energía con fuentes renovables.

Molina afirmó que la prioridad del sector se enfoca en la implementación del plan de reactivación del sector hidrocarburífero boliviano, que plantea la ejecución de estrategias a corto, mediano y largo plazo para el incremento de la producción.  

“El objetivo del plan es garantizar la sostenibilidad del ciclo de reservas, producción, comercialización de gas natural y productos derivados que permitan mantener la soberanía y seguridad energética y capitalizar las oportunidades de exportación de gas”, sostuvo Molina.

Acotó que la demanda interna actual de gas es de 11,7 MMmcd, y que no se ha incumplido ni un solo día con el abastecimiento de carburantes al mercado interno y externo.

El ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, mencionó este domingo que no hay escasez en la producción y suministro de hidrocarburos y que la reducción de gas a la demanda interna responde “enfáticamente” a la política de diversificación de la matriz energética iniciada en 2016.

“Esta semana se puso una campaña mediática para alertar a la población respecto a que no habría gas ni combustibles para el mercado interno; hacen mención al consumo de gas para termoeléctricas y que está en riesgo la producción de hidrocarburos (…). En este punto, quiero mencionar que como parte del proceso de reactivación tuvimos una coordinación con el sector energético para disminuir el consumo de gas en termoeléctricas, porque venimos desde el 2016 con una política de diversificación de la matriz energética”, aclaró el ministro en el programa Las 7 en el 7 de Bolivia TV.

Explicó que esta diversificación energética va enfocada a potenciar las fuentes renovables de energía, con proyectos eólicos, fotovoltaicos, hidroeléctricas y ciclos combinados que son ejecutados por el Gobierno desde el año 2016.

“Qué quiero decir con esto, que lógicamente hay una reducción en el suministro de gas al mercado interno por el ingreso de las energías renovables al Sistema Interconectado Nacional (SIN)”, aseveró Molina.

Apuntó que en 2020 (durante el gobierno de facto) la contracción eléctrica fue del 24 y 28%, representado por un menor consumo energético, y que, a partir del nuevo mandato a la cabeza del presidente Luis Arce Catacora, la proyección es garantizar el suministro de energía y establecer un nuevo mecanismo para generar un mayor valor agregado a los precios del gas.

“Qué curioso es que ahora los analistas alerten sobre la reducción de gas al mercado interno, cuando antes alertaban por el consumo elevado. El hecho de decir que no hay gas es totalmente absurdo, cuando este carburante no ha faltado ni un solo día en los hogares bolivianos, cuando no ha faltado GLP y combustibles”, enfatizó.

Apuntó que estos argumentos lo único que buscan es generar es una situación de zozobra en la población y descalificar la política gubernamental, iniciada en la gestión de Evo Morales, para diversificar la matriz energética.

Reiteró que se garantiza el abastecimiento de carburantes en el mercado local e internacional, y que no habrá escasez, toda vez que se reactivaron todos los proyectos de exploración y producción hidrocarburífera en el país.

“No entendemos el objeto de este tipo de publicaciones sensacionalistas, no quiero pensar que sea por la reactivación de nuestra planta de urea, que mañana reiniciará operaciones en Bulo Bulo”, destacó el ministro.

El Fondo de Desarrollo Indígena (FDI), dependiente del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, entregó en el municipio de El Torno, del departamento de Santa Cruz, dos puentes vehiculares con el objetivo de vincular las comunidades del sector y facilitar el traslado de la producción agropecuaria de la región.

Esta infraestructura caminera vinculará los distritos 2, 6 y 7 de este municipio; la obra tiene un costo total de Bs 2.448.499. El aporte del FDI es de Bs 2.354.079 y la contraparte otorgada por el Gobierno Autónomo Municipal de El Torno asciende a Bs 94.419, destaca un reporte de prensa. 

“Los puentes simplemente son un medio para facilitar el trabajo arduo que realizan; hay una necesidad urgente de reactivar la economía y la mejor forma de hacerlo es trabajando y produciendo alimentos y, como Gobierno, debemos garantizar que los recursos naturales que tenemos en el país se industrialicen y generen ganancias”, sostuvo en la inauguración de esta obra, el ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Remmy Gonzales.

La directora general ejecutiva del FDI, Rossio López, mencionó que los puentes beneficiarán a 1.370 familias e integrará a 20 comunidades. “Este proyecto, se hace realidad gracias a la unidad de todos los bolivianos, desde el FDI venimos reactivando la economía y la producción”, destacó.

El Torno tiene como principal actividad económica la agropecuaria, esta práctica es común en los habitantes y está sustentada principalmente por las cadenas agrícolas. Los cultivos agrícolas más comunes en son el maíz, los cítricos y la papa.

Además, el sector cuenta con sistemas de producción que funcionan con una larga lista de cultivos y en su mayor parte son anuales; asimismo, existen cultivos perennes y cultivo de pasturas para la ganadería; el cultivo de las hortalizas es muy importante en algunas zonas.

Los puentes están construidos de vigas de hormigón armado de 18 metros de largo cada una con un ancho total de 6,8 metros, las mismas, se encuentran apoyadas en estribos de hormigón armado; con dos carriles y aceras de circulación.