El canciller Rogelio Mayta, lamentó que el régimen de Jeanine Áñez haya ocultado la solicitud del Papa Francisco para liberar a las exautoridades que se asilaron en la residencia de la Embajada de México tras el golpe de Estado de 2019.
Mayta, entrevistado en el programa “Las 7 en el 7” difundido por Bolivia Tv, también indicó que la jerarquía católica "probablemente debiera decirnos ‘sabíamos, no sabíamos’”, respecto a la solicitud expresada por el Sumo Pontífice.
El 15 de enero de 2020 el entonces embajador de Bolivia ante el Vaticano, Julio César Caballero, envió una nota de urgencia a la entonces canciller Karen Longaric informando que el Papa Francisco sugirió “superar la crisis de los asilados en la Embajada de México en la ciudad de La Paz, proporcionando salvoconductos a aquellas personas que se encuentran en esa legación diplomática, consolidando así el proceso de pacificación y el periodo electoral iniciado por Bolivia”.
Tras el golpe de Estado, varios exministros y exautoridades permanecían asiladas entonces en la Embajada de México.
Al respecto, el canciller Mayta dijo que la omisión por parte del régimen de Áñez solo confirma que ese gobierno ingresó con la Biblia en la mano, pero no hizo caso al Papa.
“Lo que hicieron ellos, (lo) que hizo el gobierno de Áñez, agarró, ocultó la nota, nunca mencionó, nunca lo refirió y siguieron el acecho de la embajada mexicana donde estaban las personas que habían sido beneficiadas con el asilo”, sostuvo.
Según declaró Longaric al programa Asuntos Centrales, ella informó de la solicitud a Jeanine Áñez.
Respecto al papel de la jerarquía católica boliviana, el canciller Mayta dijo que ese hecho “probablemente también expone de cierta medida a la Iglesia Católica. Ellos deberán decirlo ¿no? Hay un liderazgo nacional de la Iglesia Católica, habrán sabido o no de este criterio del Papa, no lo sabemos, no hay pronunciamiento. Probablemente debieran decirnos ‘sabíamos, no sabíamos’ porque en determinado momento iban a contraflecha”.
Según el periódico La Razón, integrantes de la Conferencia Episcopal de Bolivia visitaron a Longaric cuando era ministra para solicitarle la liberación de al menos uno de los asilados en la residencia de la embajada de México.
En su solicitud expresada al embajador Caballero, el Papa sugirió otorgar salvoconductos “a aquellas personas que se encuentran en esa legación diplomática” mexicana.







