Miembros de la Asociación de Heridos y Presos Políticos del gobierno de facto de Jeanine Áñez denunciaron este martes las torturas y persecución en su contra durante el régimen, y anunciaron que se sumarán a las querellas por violaciones graves a los derechos humanos.
"Vamos apoyar de manera contundente toda denuncia que se realice contra el gobierno de facto por violaciones graves de derechos humanos y vulneraciones a todos aquellos que han sido perseguidos y presos políticos de manera ilegal y arbitraria", anunció Nadelsa Guevara, abogada de la asociación.
Asimismo, cuestionó el accionar de funcionarios del Ministerio Público, jueces e instituciones que no denunciaron las torturas a los que fueron sometidos los presos políticos en los diferentes centros penitenciarios de Bolivia, durante el gobierno de facto.
"Queremos decir a los delincuentes que hoy sostienen que el 2019 no hubo golpe de Estado, que no vamos a permitir que sigan impunes", dijo por su parte Luis Rafael Esquivel, uno de los afectados.
Sandro Enríquez, quien fue recluido en la cárcel de Mocovi del departamento de Beni, recuerda que fue detenido por solo grabar una movilización de protesta que se desarrolló en Riberalta en contra del gobierno de Áñez.
"Ellos no tuvieron compasión de nosotros, vulneraron todos nuestros derechos, incluso nuestro derecho a la salud, me dio coronavirus cuando estaba en el penal y ni siquiera con eso me dejaron acudir a un centro de salud. Estamos vivos gracias a Dios, esa señora y sus ministros no tuvieron compasión con ninguno de nosotros", recordó.







