El capitán de Navío, Oscar Vaca, comandante del Quinto Distrito Naval “Santa Cruz” de la Armada Boliviana, informó este viernes que, en apoyo a la Aduana Nacional en lucha contra el contrabando, se decomisó aproximadamente 30 toneladas de cerveza que se encontraba al interior de un domicilio en el municipio de Puerto Quijarro, del departamento de Santa Cruz.

“El 05 de agosto al interior de una vivienda se logró encontrar aproximadamente 30 toneladas de cerveza en lata de procedencia brasileña, que no contaban con la documentación que acredite su internación legal al país”, afirmó, según una nota de prensa.

Vaca dijo que esa tarea se desarrolló luego de cuatro jornadas de resguardo del inmueble por parte de efectivos navales, a requerimiento de la Aduana.

Explicó que la operación de lucha contra el contrabando contó con el apoyo de más de 120 efectivos del Batallón de Infantería de Marina V “Calama” de la Armada Boliviana, que procedieron al traslado de la mercadería, llevándola hasta depósitos de la Aduana que tomará las acciones legales correspondientes.

Analistas de La Paz y Pando destacaron este viernes que las medidas implementadas por el Gobierno de Luis Arce Catacora desde noviembre de 2020, permitieron obtener importantes resultados, como la reducción de la pobreza, el descenso del desempleo y el crecimiento económico.

En contacto con Bolivia Tv, el analista y gerente general de la Gestora Pública, Jaime Durán, señaló que en el mensaje que el Jefe de Estado dio esta jornada a la nación se logró sintetizar lo que en poco tiempo ocurrió en el país, en temas de producción, desempleo y pobreza principalmente.  

“El presidente nos muestra cómo entre enero y abril habíamos crecido en un 5,3% (…). Otro dato concomitante acompañado a esto es el tema del desempleo; en la época neoliberal, la tasa del desempleo llegaba al 8,7%, entre el 2005 y el 2019, en el gobierno del (ex)presidente Evo Morales, se reduce a 4,3% y a julio de 2020 llegamos a una tasa del 11,7%”, explicó.  

Señaló que el año pasado, durante el gobierno de facto de Jeanine Áñez, retornó el neoliberalismo al país, entonces bajó la producción, se registró un alto desempleo y pobreza, lo que afectó a las familias bolivianas.

“(Pero) ¿qué es lo que ocurre el año 2021? ¿Qué es lo que ocurre a partir de la asunción del presidente Luis Arce?, lo que ocurre es que se retoma el Modelo Económico Social Comunitario Productivo (MESCP) que se caracteriza por la intervención del Estado”, enfatizó.

Al retomar el MESCP se retomó e implementó importantes medidas como la inversión pública, el Bono Contra el Hambre de Bs 1.000, que a mayo de 2021 benefició a más de 4.035.773 personas con más de Bs 4.000 millones, entre otros, resaltó. 

“En resumen, lo que ha ocurrido el año 2020 es tratar de que el Estado se retire, tratar de implantar un modelo neoliberal y ahora lo que tenemos es la vuelta del Estado, la vuelta de la política económica y en ese sentido yo considero que la frase final que utiliza el presidente, resume lo que está ocurriendo, estamos saliendo adelante”, sostuvo Durán.

Por su parte, el analista Tito Zurita, de Pando, explicó que el mensaje del Presidente fue “bastante contundente” porque pudo puntualizar cuatro ejes bastante importantes que son: economía, salud, educación y empleo.   

“Por ejemplo para la salud, (el mandatario) ha señalado de que tiene previsto hasta diciembre de este año que el 90% de la población de 18 años para adelante esté vacunada. Esto es bastante importante para que la gente pueda desenvolverse como tal”, acotó.

Resaltó también la reactivación de las empresas estratégicas y las inversiones en proyectos estratégicos para fortalecer el aparato productivo, beneficiar a los agricultores del país y a las familias bolivianas principalmente.

El presidente del Estado, Luis Arce Catacora, afirmó este viernes que la mejor manera de crecer es “redistribuir, cerrando esas enormes brechas entre ricos y pobres”, aspecto que es impulsado por el Modelo Económico Social Comunitario Productivo (MESCP), retomado en noviembre de 2020. 

En la sesión de honor por el 196 aniversario de Bolivia, el Jefe de Estado destacó el comportamiento económico registrado en el país durante catorce años (2006-2019) gracias al MESCP, contrario al modelo neoliberal. 

“Tuvimos un crecimiento económico sostenido, acompañado de políticas sociales y productivas. Ocupamos los primeros sitiales en crecimiento de la región en 2009 el 3,4%; 2014 el 5,5%; 2015 el 4,9%; 2016 el 4,3% y en 2018 el 4,5%, y lo alcanzamos redistribuyendo los ingresos. Estoy convencido de que la mejor manera de crecer, es redistribuir, cerrando esas enormes brechas entre ricos y pobres”, dijo.

Subrayó que a través de las políticas redistributivas, esos resultados económicos también se tradujeron en mejoras en el ámbito social, desde 2005 hasta 2019, con la disminución de la pobreza y de la pobreza extrema, de 60,6% a 37,2%, y de 38,2% a 12,9%, respectivamente.

“De igual forma, la desigualdad pasó de 0,60 (por ciento) en 2005 a 0,42 (por ciento) en 2019, y se redujeron las brechas de ingresos pasando del 35% a 59%, el porcentaje de personas con ingresos medios en nuestro país”, añadió.

Destacó también que se revalorizó la moneda a través de la bolivianización. De ese modo, ahora el 99% de los créditos y el 86% del ahorro financiero se encuentran en moneda nacional, en total contraste con el periodo neoliberal, cuando esos indicadores apenas alcanzaban un 15% y 7% respectivamente. 

“En noviembre de 2019, nos arrebataron esos logros. La derecha boliviana irrumpió nuestro orden constitucional con el único objetivo de asaltar al Estado con fines particulares, retornando a los privilegios de clase y de satisfacción de las altas élites como antes del 2006”, manifestó.

El presidente del Estado, Luis Arce, aseguró este viernes que la cuarentena rígida y militarizada, aplicada por el gobierno de facto de Jeanine Áñez, ante la pandemia del COVID-19, “solo sirvió para que se generen escenarios de corrupción y saqueo de las arcas estatales”. 

“La cuarentena rígida y militarizada, determinada por el gobierno de facto, con la excusa de prevenir la pandemia, solo sirvió para que se generen escenarios de corrupción y saqueo de las arcas estatales. Las desacertadas decisiones de política económica, social, sanitaria y cultural quedarán escritas en nuestra historia como un atentado al pueblo boliviano”, manifestó el mandatario en la sesión de honor por el 196 aniversario de Bolivia.

La autoridad señaló que el gobierno de facto “demostró una vez más, que la derecha jamás representará el verdadero interés del pueblo”, porque “solo busca el interés de unos cuantos, sin importar la miseria generada en las familias”.

“En este tiempo, hemos evidenciado cómo los 11 meses, que duró el gobierno de facto y la derecha boliviana, destruyeron la economía de los hogares y empresas bolivianas, públicas y privadas”, sostuvo el Presidente.

La autoridad lamentó que durante el régimen de facto, en el Estado boliviano, se hayan paralizado importantes proyectos y empresas públicas, como por ejemplo, las plantas de cemento en Oruro y de urea en Cochabamba.

“Similar destino sufrieron la Planta Industrializadora de Vidrios (Envibol), la Planta Eólica La Ventolera, los proyectos de exploración de YPFB (Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos), los proyectos apícolas en Chuquisaca, la Planta de Cítricos, el Ingenio Azucarero San Buenaventura (Easba) en el norte de La Paz, entre otros”, señaló, 

Cuestionó que a causa de la paralización de proyectos e industrias estatales se estaba “desechando productos alimenticios mientras el pueblo sufría de hambre”, en plena pandemia por el COVID-19.

“El Centro (de Investigación y Desarrollo en Tecnología) Nuclear (CIDTN), tan necesario para la investigación en diversas áreas, no avanzó durante 2020 y los beneficios para el pueblo en salud se vieron rezagados por esas decisiones erróneas y discrecionales que han costado vidas”, manifestó.

El Presidente señaló que su Gobierno trabaja en la reactivación de los distintos proyectos y empresas públicas estratégicas. En ese sentido, la construcción del CIDTN, por ejemplo, fue reactivado para beneficiar a los distintos sectores del pueblo boliviano, como la producción, la industria, la salud, entre otros. 

“(También) estamos impulsando la generación de industrias, la sustitución de importaciones, la industrialización de nuestros recursos naturales y el fortalecimiento de la producción nacional, lo ‘Hecho en Bolivia’, política que todas y todos debemos apoyar, valorando el trabajo realizado por manos bolivianas”, acotó.

También indicó que en su gestión se trabaja para desarrollar la industria de la química básica, para producir carbonato e hidróxido de sodio, ácido sulfúrico o clorhídrico, hidróxido de calcio o litio, carbonato de litio y cloruro de potasio.

“(Asimismo vamos a desarrollar) la industria de camélidos, la planta de fundición y refinación de concentrados de zinc, la implementación de la industria de cárnicos, plantas piscícolas, la planta de diésel ecológico, la producción de hierro y acero en el Mutún, incremento de la energía eléctrica, exportación de energía, fomento a las empresas comunitarias, aumento de la producción agropecuaria con transferencia de tecnología, manejo de suelos y agricultura de precisión, así como la producción silvopastoril”, subrayó.