La Paz, 08 de septiembre de 2025 (ABI).- El Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural reafirmó que la industrialización se consolida como política de Estado y motor del desarrollo en Bolivia, por lo que rechazó versiones que intentan minimizar este proceso.
“Ante algunas opiniones infundadas que aseguran que el presidente Luis Arce no ha impulsado la industrialización, queremos aclarar que ha sido, precisamente, este Gobierno el que ha llevado adelante un verdadero proceso de industrialización, incorporando química básica, industria farmacéutica y más de 170 plantas industriales. Realmente se están sentando las bases estructurales para un proceso sostenible que beneficiará a las futuras generaciones”, remarcó el viceministro de Políticas de Industrialización, Luis Siles.
Según el Ministerio de Desarrollo Productivo, en la actualidad, el Gobierno impulsa más de 170 plantas industriales en construcción o funcionamiento en distintos departamentos.
Estas iniciativas abarcan sectores como agroindustria, alimentos balanceados, bioinsumos, aceites vegetales, piscicultura, biocombustibles y almacenamiento estratégico de granos y tubérculos para la soberanía económica y la generación de empleo en el territorio nacional.
La cartera de Estado rechazó las declaraciones recientes de Evo Morales, “quien intenta minimizar el proceso de industrialización con expresiones referidas a la piñita y papita”.
“La planta de piña en Ivirgarzama, en el trópico de Cochabamba, a la que el exmandatario aludió de manera despectiva, fue precisamente creada durante su propio gobierno, como parte del plan de diversificación productiva que ahora desconoce”, refiere el reporte de prensa de Desarrollo Productivo.
En tanto, la planta procesadora de piña del municipio de Entre Ríos, implementada en el gobierno de Luis Arce, beneficia a 450 familias productoras de 32 comunidades; la planta procesadora de papa en Chuquisaca favorece a 5.600 familias, y la planta de transformación de papa en El Alto beneficia a 79.980 familias productoras.
El objetivo central es sustituir importaciones, diversificar la producción y generar valor agregado a la riqueza natural y agrícola de Bolivia, impulsando el desarrollo desde lo local.
Cada planta responde a las potencialidades regionales: papa en los Andes, piña en los valles, castaña en la Amazonía, granos en el oriente, entre otros.
El Ministerio de Desarrollo Productivo ratificó que continuará avanzando en este camino, con una visión de soberanía productiva, seguridad alimentaria y desarrollo con justicia social, pese a las dificultades económicas y políticas que buscan frenar este proceso.
“La apuesta por la industrialización ha permitido dinamizar economías locales, abrir oportunidades de empleo y fortalecer a miles de productores, quienes hoy participan en cadenas de valor que antes estaban dominadas por la importación o el contrabando”, remarca el reporte institucional.
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