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Dos décadas de avances económicos y sociales marcan los 200 años de vida independiente de Bolivia

Dos décadas de avances económicos y sociales marcan los 200 años de vida independiente de Bolivia

La Paz, 05 de agosto de 2025 (ABI). – A horas de cumplir 200 años de vida independiente, Bolivia presenta indicadores económicos y sociales reflejo de un proceso de profunda transformación registrada en las últimas dos décadas.

Entre 2006 y 2025, el país alcanzó récords históricos en inversión pública, Producto Interno Bruto (PIB) per cápita, reducción de la pobreza, disminución de la desigualdad de ingresos y del desempleo, afirmó este martes el Ministerio de Economía.

“Destacan la reducción de la deuda externa como porcentaje del PIB, el crecimiento del crédito productivo, el incremento de la recaudación tributaria, la democratización financiera y la redistribución del ingreso a través de programas de transferencias directas, como los bonos Juancito Pinto, Juana Azurduy y la Renta Dignidad, entre otros”, indica un reporte de esa cartera de Estado.

Según datos oficiales, en 2024, el PIB nominal ascendió a $us 46.967 millones, el valor más alto registrado en la historia económica del país. Esta cifra representa un crecimiento del 27,3% respecto a 2020 y del 14,0% en relación con 2019.

En términos reales, el PIB creció en promedio un 3,4% entre 2021 y 2024, pese a un contexto internacional adverso y a factores internos que limitaron la reactivación económica, como los bloqueos y la caída en la producción de hidrocarburos.

En 2024, el PIB per cápita llegó a $us 3.808, la cifra más alta registrada, que comparada con 2020, representa un crecimiento del 20,5% y respecto a 2005, el aumento es del 267,1%. La tendencia general es ascendente, con un fuerte impulso desde la implementación del Modelo Económico Social Comunitario Productivo (MESCP).

La inversión pública acumulada entre 2006 y 2024 alcanzó $us 52.887 millones, más de cuatro veces el monto registrado durante el periodo 1985-2005. El principal destino de esta inversión fue a sectores productivos, sociales e infraestructura.

En el ámbito externo, el valor promedio de las exportaciones entre 2021 y 2024 fue de $us 11.188 millones, un 34,8% superior al promedio de 2006-2019. La participación promedio de la industria manufacturera en el volumen exportado en este mismo período alcanzó el 30%, reflejo de un cambio en la estructura exportadora. A mayo de 2025, los principales productos exportados fueron los minerales de zinc y plata, el gas natural, soya y sus derivados, oro metálico y estaño metálico.

A nivel financiero, la cartera de créditos alcanzó $us 33.050 millones a junio de 2025, mientras que el crédito productivo sumó $us 15.965 millones, beneficiando a más de 929.000 emprendimientos; el 38% se dirigió a la industria manufacturera, seguido de la agricultura, la construcción y el turismo.

Al 30 de junio de 2025, el monto desembolsado de los créditos SIBolivia ascendió a Bs 1.916 millones, de este total, el 62,8% se destinó a la industria manufactura, mientras que desembolso acumulado por el programa Mujer BDP a junio de 2025 ascendió a Bs 1.081 millones, en 18.223 operaciones. Este programa, implementado por el Gobierno del presidente Luis Arce, da un fuerte un impulso a la autonomía económica de las mujeres.

El nivel de bolivianización de los créditos llegó al 99,6%, y el de los depósitos al 91,6%, cuando en 1997 apenas alcanzaban el 3,4% y 6,6%, respectivamente.

En 2024, el sistema financiero reportó utilidades por $us 390 millones, un incremento del 27% frente a 2023. A junio de 2025, las utilidades ya sumaban $us 166 millones, con un crecimiento del 29%, comparado con el mismo período del año anterior.

Por otra parte, la recaudación tributaria pasó de un promedio anual de Bs 6.251 millones (1990-2005) a Bs 47.723 millones entre 2006 y 2024. En el actual periodo de gobierno, el promedio asciende a Bs 56.214 millones, lo que refleja una mejora en los mecanismos de recaudación.

La deuda pública externa se redujo hasta el 25,0% del PIB a junio de 2025, muy por debajo del 63,5% registrado en 2003 y del 99% de 1987. Este indicador se mantuvo bajo control pese al contexto interno y externo adversos.

En el plano social, Bolivia redujo la pobreza extrema al 11,9% en 2023, tras un incremento temporal durante la pandemia. La pobreza moderada bajó al 36,5%. El coeficiente de Gini alcanzó 0,43, este mismo año, frente al 0,60 de 2005.

La brecha de ingresos entre el 10% más rico y el 10% más pobre se redujo de 128 veces en 2005 a 21 veces en 2023; estos indicadores reflejan la reducción de la desigualdad de ingresos.

El salario mínimo nacional se elevó hasta Bs 2.750 en 2025, un aumento acumulado del 525% respecto a 2005. En paralelo, la tasa de desocupación urbana se redujo al 3,3% en 2024, una de las más baja desde 1996.

En cuanto a la redistribución del ingreso, en 2024, el Bono Juancito Pinto benefició a alrededor de 2,3 millones de estudiantes de unidades educativas fiscales y de convenio, la Renta Dignidad llegó a aproximadamente 1,3 millones de adultos mayores y el Bono Juana Azurduy a 215.889 embarazadas y niñas y niños menores de dos años.

La tasa de abandono escolar bajó al 1,7% en 2023, frente al 6,4% de 2006 y la tasa de mortalidad materna se redujo a 146 decesos por cada 100.000 nacidos vivos en 2023, una reducción del 49% respecto a 2000.

El número de ítems en salud y educación se incrementó. En salud alcanzó los 48.900 en 2024, un aumento 171,9% respecto a 2005 y en educación, llegó a 193.462, un aumento del 35,8% respecto al año de comparación.

Los datos reflejan que, a lo largo de las dos últimas décadas, el Estado boliviano canalizó recursos públicos para ampliar el acceso a servicios, reducir desigualdades y sostener la demanda interna.

Rdc/MC/Afbs


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