Presidente entrega a un productor una planta de las especies oleíferas. (Foto: Captura)
El Presidente alienta los sembradíos de plantas oleíferas para producir diésel y dejar de depender de la importación

El Presidente alienta los sembradíos de plantas oleíferas para producir diésel y dejar de depender de la importación

Cochabamba, 02 de agosto de 2022 (ABI).- En un simbólico acto en Ucureña, Cochabamba, el presidente Luis Arce entregó a un productor campesino de San Julián, Santa Cruz, una planta de las especies oleíferas para que la siembre en sus tierras y sea parte de toda una política para emplear estas plantas en la producción de diésel destinado a sustituir la importación y cubrir la demanda de sectores como el agro.

Julián Torrico, es el productor cruceño que no solo recibió de manos de Arce la planta sino una copia del decreto 4764 aprobado el 20 de julio y que crea el Programa de Fomento a la Producción de Especies Oleíferas con un presupuesto superior a los Bs 402 millones para “implementar condiciones técnicas y tecnológicas para el desarrollo de cultivos y de la base productiva de especies oleífera”.

Fue en el acto por el Día de la Revolución Agraria, Productiva y Comunitaria, que se celebró en Ucureña con una masiva participación de indígenas originarios y campesinos, que el Presidente socializó e impulsó este programa que busca la siembra de estas plantas que son insumo para la producción de diésel, un producto que importa Bolivia.

“Esa dependencia, nosotros, la queremos cambiar, produciendo esta especie oleíferas. Bolivia va a empezar a producir materia prima que, a través de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), vamos a convertir el aceite que producen estas plantitas, como la palma africana y otras, en diésel”, explicó.

El programa estará a cargo del Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (INIAF) y tendrá una vigencia de cinco años. La siembra se impulsará en “zonas potenciales las capacidades de los productores locales con el manejo sostenible del cultivo en términos económicos, ambientales y sociales”, según el decreto 4764.

Bolivia importa diésel y gasolina, para abastecer la demanda que es subvencionada. El diésel no solo es utilizado en los vehículos del transporte público, sino en la maquinaria agrícola y en los motorizados que trasladan los productos agrícolas a los lugares de comercialización.

“Vamos a empezar a producir nuestro propio diésel, queremos ser absolutamente independientes, no queremos estar importando, es parte de la sustitución de importaciones, por eso apuntamos a que nosotros produzcamos con nuestras propias manos, en nuestra propia tierra, nuestro propio diésel y dejemos de importarlo”, alentó Arce.

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