Santa Cruz, 19 de septiembre de 2025 (ABI). - El juez cautelar que atendió el caso del padre del estudiante de 12 años —quien ingresó a su unidad educativa con un arma de fuego— dispuso medidas sustitutivas a la detención preventiva.
Entre las medidas impuestas se encuentran el arraigo, la obligación de presentarse cada 15 días ante las autoridades, la prohibición de portar armas y la asistencia obligatoria a sesiones de orientación psicológica para el padre y el menor.
“El señor juez estableció que el imputado debe presentarse cada 15 días, mantener arraigo, asistir a una orientación psicológica junto a su hijo y tiene estrictamente prohibido portar armas de fuego”, informó la fiscal Delmy Guzmán, en contacto con la prensa.
Durante la audiencia, el padre del menor aseguró que el arma secuestrada era antigua, de uso civil y que había sido heredada por la familia. Alegó que no se encontraba en condiciones operativas.
“Refirió que se trataba de un arma sin percusión, guardada en una chauchera desde hace años”, detalló la fiscal.
Sin embargo, será un perito del Instituto de Investigaciones Técnico Científicas de la Universidad Policial (IITCUP) quien determine el estado real del arma mediante una pericia especializada.
El acusado también pidió disculpas por lo ocurrido y reconoció la negligencia de haber dejado el arma al alcance de su hijo, situación que derivó en la intervención de la Policía y la posterior suspensión temporal del menor de su establecimiento educativo.
La pistola fue secuestrada como evidencia y está bajo custodia mientras se realizan los peritajes correspondientes.
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