La analista política Anahí Durand aseguró este lunes que en Perú hubo una campaña de miedo desde la derecha para estigmatizar al candidato Pedro Castillo con connotaciones racistas por su procedencia campesina, lo que polarizó la campaña en la segunda vuelta.
"Hubo una campaña de miedo, de terror desde la derecha peruana, estigmatizando al candidato (Pedro) Castillo con connotaciones bastante racistas por su procedencia campesina y la forma cómo se viste, ha sido una segunda vuelta tensa y polarizada", aseveró en una entrevista con Bolivia Tv.
La analista peruana, explicó que se preveía que los resultados iban a ser muy ajustados, ya que se trató de deslegitimar la candidatura de izquierda.
Asimismo, dijo que la pequeña diferencia en votación era previsible, siendo que al 96% de las mesas escrutadas, Castillo logró un 50,28% y Keiko Fujimori un 49,72%.
“Se auguraba que iban a ser unos 50.000 o 60.000 votos de diferencia. En 2016 fueron 44.000 votos los que separaron a Pedro Pablo Kuczynski de Keiko Fujimori, así que esto está previsto”, indicó.
Durand aseguró que existe mucha expectativa en ese país y el organismo electoral anunció que entre el martes y el miércoles se darán los resultados finales, pero se vislumbra al ganador de la contienda que sería Pedro Castillo.
Por otro lado, sostuvo que los organismos electorales en Perú se caracterizaron siempre por mantener independencia, motivo por el cual lo que plantea Fujimori, sobre un presunto fraude, muestra una posición que desconoce los resultados porque no le favorecen.
“La actitud de ella y de su partido de denunciar fraudes deslegitimando al organismo electoral no le hace bien a la democracia, hay que esperar al 100% de los votos. Esa debería ser la actitud, llamar a la cautela, es momento de llamar a la calma y no es lo que está haciendo Keiko Fujimori con las denuncias de irregularidades”, afirmó.
