El sector avícola sufre la falta de abastecimiento de harina de soya solvente, principal insumo para la crianza de aves, que no es entregada por la industria aceitera, informó este martes, Ricardo Alandia, presidente de la Asociación Departamental de Avicultores de Santa Cruz.

El Gobierno, a través de la Resolución Biministerial Nº 010.2020 de fecha 24 de diciembre de 2020, estableció una banda de precios para los productos derivados de la industrialización del grano de soya, entre ellos, la harina solvente de soya.

“Sin embargo, la industria aceitera no está acatando esta resolución, negándose a atender las solicitudes de compra y dando como excusa que el Gobierno aún no les ha remitido las listas de asignaciones de cupos correspondientes” denunció Alandia.

“De continuar esta situación se va a generar un desabastecimiento de alimentos de primera necesidad y de consumo masivo. La falta de insumos básicos para la producción pone en riesgo el cierre de miles de unidades productivas lecheras, avícolas y porcícolas”, indicó.

El Gobierno informó este martes que los prestatarios que decidan reprogramar o refinanciar los créditos recibidos de las entidades financieras se beneficiarán con al menos cuatro meses de periodo de gracia para poder retomar sus actividades económicas.

"Como mínimo se está poniendo una base de cuatro meses y en función a la evaluación que se haga y a las características de cada uno de los deudores, haciendo un análisis caso por caso, podrán acordar con la entidad financiera un plazo mayor", dijo la viceministra de Pensiones y Servicios Financieros, Ivette Espinoza.

En una conferencia de prensa, la autoridad explicó que el Ministerio de Economía acordó con la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) emitir una resolución estableciendo ese beneficio para los prestatarios que todavía no pueden pagar sus créditos.

"Cuando hablamos de periodos de gracia, estamos hablando que se paga una porción pequeña. Generalmente es el interés que se debe pagar", apuntó.

Espinoza recordó que el año pasado, cuando se estableció el diferimiento en el pago de los créditos por la pandemia del coronavirus, no se canceló ni capital ni interés, una situación que no puede continuar -dijo- para no afectar la estabilidad de las entidades financieras.

Los cuatro meses de gracia "da una solución real a las necesidades de los prestatarios, de que sus cuotas sean adecuadas a su nueva capacidad de pago y también de tener acceso a nuevos recursos que les permita sacar adelante sus actividades que tenían paralizadas por este tema del COVID-19", remarcó.

El secretario ejecutivo de la Federación del autotransporte 15 de Abril, Damián Castillo, informó que el 99% de los casi 9.000 choferes del sector público de Tarija se benefició en la última década del programa gubernamental de reconversión gratuita para sustituir el uso de gasolina por Gas Natural Vehicular (GNV).

"En los más de diez años que ya está el programa en el departamento, el servicio público casi está en un 99 por ciento (de reconversiones)", manifestó a la ABI.

El dirigente mencionó que el 1% restante está conformado por choferes cuyos motorizados fueron renovados o vendidos para la adquisición de unidades nuevas.

El representante del autotransporte manifestó, sin embargo, que el programa gubernamental fue suspendido a nivel regional."En la gestión anterior menos de un mes ha habido reconversión", aseveró.

El dirigente mencionó que los afiliados del sector del autotransporte pedirán a las autoridades nacionales que el programa sea reanudado "lo más antes posible" para contar con sus beneficios.

Un informe del Banco Mundial estableció que Bolivia estará entre los países latinoamericanos que más crecerá en 2021, con un 3,9%, por encima del promedio regional.

Ese organismo, en su informe "Perspectivas económicas globales", publicado este martes, pronosticó un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de 3,7% en América Latina y el Caribe para este año.

La previsión del Banco Mundial es menor en comparación con la proyección del Gobierno boliviano, que prevé que la expansión económica del país será del 4,8%.

Para 2022, el organismo financiero internacional proyecta una expansión del PIB boliviano de 3,5%.

Según el informe del Banco Mundial, los riesgos para las perspectivas de crecimiento de América Latina y el Caribe están asociados al control de la pandemia, las negociaciones para la financiación externa y las reestructuraciones de las deudas.