La Paz, 12 de noviembre de 2025 (ABI). – Como efecto de los cambios que alista el presidente Rodrigo Paz, el riesgo país de Bolivia cae a niveles no vistos desde el 21 de julio de 2023, informó este miércoles la revista especializada Bloomberg.
Después de más de dos años, el riesgo país boliviano descendió de la barrera de los 1.000 puntos a un indicador de 955, de acuerdo a cifras recogidas en un análisis del economista e investigador Luis Fernando Romero Torrejón.
El 10 de noviembre, el riesgo país fue de 930 puntos, la cifra más baja desde el 21 de julio de 2023, cuando este índice fue de 932 puntos, indicó el analista.
La caída en el rendimiento de los bonos se da luego de la victoria de Paz – en agosto y octubre - poniendo fin al gobierno del Movimiento Al Socialismo que se extendió por 20 años, con un intervalo, en 2020, con la presidencia de Jeanine Áñez.
El riesgo país es un indicador que refleja la percepción de los mercados financieros sobre la capacidad y voluntad de un país para cumplir con el pago de su deuda soberana.
Este indicador se mide a través del EMBI, elaborado por JPMorgan Chase (JPM), uno de los principales bancos de inversión del mundo.
“Sin duda, las elecciones nacionales tuvieron una incidencia notable en la baja de este indicador, por ejemplo, el 18 de agosto (primera vuelta) el riesgo país fue de 1.207 puntos”, informó Romero Torrejón, expresidente del Colegio de Economistas de Tarija. Ya “el 20 de octubre, un día después del balotaje, bajó de manera más importante a 1.132 puntos”.
Desde entonces, la tendencia a la baja se mantuvo, teniendo un repunte a finales de octubre y principios de noviembre.
Romero dice que los inversores estarían valorando este cambio de gobierno en Bolivia “a uno más liberal, promercado y abierto para recibir inversiones extranjeras”.
También se refiere al respaldo internacional al nuevo gobierno de Paz y la expectativa por el logro de un financiamiento internacional.
Otros factores que pueden estar pesando en la ecuación son las reuniones y compromisos con el sector privado nacional e internacional y el esperado restablecimiento de relaciones con Estados Unidos, que “genera expectativas positivas” en el ámbito político y financiero.
Según Romero, también hay expectativa por la llegada relativa de carburantes para aminorar la crisis energética, como sucedió el fin de semana con el arribo de más de 900 camiones cisternas.
En general, dice que hay optimismo por el “inicio de la resolución gradual de los problemas macroeconómicos vigentes en el país”.
“El cambio de modelo económico y político de casi 20 años ha sido observado con buenos ojos, generando optimismo en los mercados internacionales, y más confianza a inversionistas y prestamistas externos, que ven que Bolivia ha aumentado sus posibilidades de responder sus compromisos, evitando un posible default”, dijo Romero.
De todas formas, Bolivia continúa siendo el segundo país con mayor riesgo para invertir en la región, luego de Venezuela.
“Sin duda, la llegada del nuevo gobierno de Rodrigo Paz fue positivo para la economía nacional, pero esto recién empieza. El proceso todavía será largo y difícil en la meta de estabilizar al país y sacarlo de su actual crisis”, apuntó el analista.
Rodrigo Paz tomó posesión como presidente de Bolivia el 8 de noviembre y prometió poner en marcha un esquema de “capitalismo para todos”. Bolivia “vuelve al mundo y el mundo vuelve a Bolivia”.
“Nos dejan un país quebrado. Un país cansado, dividido, endeudado moral y materialmente. Nos dejan la peor crisis de las últimas cuatro décadas”, expresó.
La CAF ya ha confirmado un programa de $us 3.100 millones para Bolivia a lo largo de cinco años.
Bolivia acumula ya cuatro trimestres consecutivos de contracción del PIB en términos interanuales, confirmando un proceso recesivo prolongado que comenzó en la segunda mitad de 2024.
El país presentó contracciones de la economía del 1,97% en el primer trimestre de este año y del 2,79% en el segundo.
Rdc/Jfcch/CC







