El director de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), Juan Yujra, afirmó este jueves que el acuerdo que otorga seis meses de gracia a los prestatarios, sin el pago del capital ni interés, no representa “ninguna amenaza para el sector financiero”.

“El hecho de no percibir ingresos durante estos meses de gracia, representa una limitación a la contracción, pero no al punto de ocasionar una amenaza sobre el sector financiero”, señaló en una entrevista con el programa ‘180 Minutos de Periodismo' difundido por radio Illimani.

Horas antes, la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) rechazó el acuerdo firmado entre la dirigencia del transporte y el Gobierno nacional porque –en su juicio- constituye, en la práctica, un nuevo diferimiento de seis meses más, “lo cual representa un duro golpe al sistema financiero y pone en peligro su estabilidad, dada la heterogeneidad de las entidades que lo componen”.

Al respecto, el director de la ASFI recordó a la Asoban que a partir de la promulgación de la Ley de Servicios Financieros “la actividad financiera es una función social”.

“Es una función social y corresponde que las entidades asuman este papel y mucho más en una coyuntura tan difícil como la que estamos atravesando. La banca debe  ser empática con la población, la ciudadanía y los clientes”, manifestó.

Yujra sostuvo que la labor de la ASFI es “revertir esa perspectiva de negocio que tenía el sector financiero” y hacer cumplir la función social que establece la ley.

Organizaciones económicas campesinas, la Central Obrera Boliviana (COB) y universidades del país definieron una agenda conjunta para reactivar la agricultura familiar, abrir nuevos mercados y lograr la transformación de la materia prima, según informaron sus dirigentes.

Con ese objetivo se reunieron la COB, la Coordinadora de Integración de Organizaciones Económicas Campesinas de Bolivia (CIOEC), la Red de Organizaciones de Productores Agrícolas y Forestales (ROPAF) y UNABENI, una asociación de productores del norte de La Paz.

En ese encuentro, manifestaron la importancia de trabajar en alianza, con investigación, tecnología y aprovechar el Decenio de la Agricultura Familiar Campesina Indígena Originaria e Intercultural de Bolivia 2019 - 2028, respaldado por las Naciones Unidas.

“Estas propuestas de reactivación de proyectos productivos vamos a incorporar en el pliego petitorio que presenta la COB al Gobierno (…) y así apoyar a los productores que hoy vienen tropezando con lo que es la pandemia”, informó el dirigente de la COB, Juan Carlos Huarachi.

La COB expresó su total respaldo a la Estrategia Nacional de la Agricultura Familiar, por lo que participará en el proceso de socialización y validación que se desarrollará en las siguientes semanas.

“Para la ROPAF - CIOEC Bolivia es satisfactorio poder contar con el respaldo de la entidad más importante del país como es la COB, vamos a seguir trabajando para la reactivación de las unidades productivas”, destacó por su parte el presidente de la coordinadora campesina, René Rojas.

El acuerdo que alcanzaron el Gobierno y los sindicatos del transporte público dio tranquilidad a los diferentes sectores económicos del país que comenzaron a reactivar sus actividades, afirmó este jueves el gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez.

"Si hay una preocupación en el pueblo boliviano en el momento actual, aparte de la pandemia provocada por el COVID-19, es la recuperación económica (…) Nosotros saludamos que el Ministerio de Economía, ASFI y los transportistas hayan arribado a un acuerdo, porque eso va a permitir volver a trabajar con tranquilidad", dijo.

El miércoles el Ministerio de Economía, la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) y el sector del transporte firmaron un acuerdo que otorga seis meses de gracia a los prestatarios, sin el pago del capital ni interés.

Ese convenio extinguió un posible paro nacional y favorece a todos los prestatarios que se acogieron al diferimiento de créditos: micro y pequeños empresarios, artesanos, gremiales y otros.

"Ahora más que nunca tenemos que trabajar los bolivianos para recuperar los más de 250 mil empleos que se han perdido por causa de la cuarentena", señaló Rodríguez.

El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, aseguró este jueves que los seis meses de gracia para el pago de créditos bancarios no pone en riesgo la liquidez de las entidades financieras.

"En este momento hay la liquidez suficiente y hay mecanismos (de inyección de recursos) si algún banco tuviese algún tipo de restricción de liquidez", dijo.

El Ministerio de Economía y la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) fijaron un periodo de gracia de seis meses, sin pago de interés ni capital, por la reprogramación o refinanciamiento de créditos.

En ese periodo los prestatarios recibirán información para optar por una reprogramación o un refinanciamiento y las entidades bancarias podrán ofertar tasas de interés u otros incentivos para impulsar el pago de las deudas.

Según el Ministro de Economía, el volumen de los créditos con saldos pendientes de pago, debido a la crisis por el coronavirus, representan un 11% de la cartera total de deudas bancarias.

"Es más que todo microcrédito, son pequeños montos y el volumen de personas es lo más grande, pero el volumen de cartera (de deuda) relativamente es pequeño, es el 11 por ciento del sistema. No creemos que la liquidez del sistema se caiga como se está señalando", sostuvo.

La ASFI informó, por su parte, que las entidades financieras que operan en el país cuentan con la liquidez necesaria para mantener la dinámica de créditos.

"El sistema financiero nacional cuenta con 6.828 millones de dólares de activos líquidos al 28 de diciembre de 2020, lo que representa un 42,1% de los pasivos de corto plazo, similar al promedio que se maneja a nivel de la región; recursos que permiten a las entidades financieras cumplir con sus obligaciones operativas y financieras de corto plazo", señaló.