Chuquisaca, 19 de agosto de 2024 (ABI).- El vicepresidente David Choquehuanca advirtió que la “angurria por el poder es el último paso antes de la desintegración”, y consideró que es necesario dejar de lado la pretensión de hacer “que todos piensen como el caudillo”.
Choquehuanca hizo la reflexión en Monteagudo, Chuquisaca. “Se tiene que celebrar el culto a la vida, no a la personalidad. Hoy día, en algunos líderes, prevalece la imposición de lo que piensa el líder, la imposición de lo que le conviene a él, no a su pueblo. Quieren que todos piensen como el caudillo, descerebrar y paralizar el pensamiento de nuestro pueblo”, afirmó.
La segunda fase del denominado Proceso de Cambio debe -aseguró- alejarse del culto a la personalidad que prevalece en ciertos líderes autoritarios, quienes imponen sus ideas y silencian las voces del pueblo, consideró.
El expresidente Evo Morales trata de imponer su candidatura presidencial, pese un fallo constitucional que estableció, en concordancia con una opinión consultiva a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte-IDH), que la reelección indefinida no es un derecho humano, lo que afecta las aspiraciones del expresidente que gobernó Bolivia en tres gestiones consecutivas, y pretendía una cuarta.
Para Choquehuanca, el verdadero liderazgo no radica en imponer ideas, sino en guiar y hacer pensar a las comunidades, promoviendo un gobierno que no se base en jerarquías, sino en la capacidad de todos los seres humanos para resolver sus propios problemas.
“El nuevo Estado necesita guías que sepan trascender las divisiones y las adversidades, guías que comprendan que la angurria por el poder es el último paso antes de la desintegración, antes de hacerse polvo", afirmó.
Choquehuanca demandó dejar de utilizar al pueblo y convocó a “sanar heridas, las tensiones tanto externas como internas, y trabajar por la convivencia entre todos los bolivianos".
rdc/cc

