El embajador de Bolivia ante la Unesco, Roberto Aguilar, aclaró este miércoles que Bolivia, al defender sus danzas, defiende su historia, cultura y patrimonio que fue construido por generaciones y vivencia de las regiones del país.
"Todas las expresiones festivas denotan componentes culturales a través de la escritura, danza, música, poesía que son construcciones de habitantes de regiones que articulan su historia y configuran la cultura, al bailar la Morenada se representa lo que uno ve y siente como sociedad. Es entender la expresión histórica, conclusión de busto con determinada expresión de habilidades conjunción de elementos históricos de percepción y comprensión de la realidad vivida", precisó en una entrevista con Patria Nueva.
En ese entendido, recordó que el Estado boliviano realizó todos los pasos para obtener el patrimonio del Carnaval de Oruro y sus danzas, entre ellas la Morenada, que está inscrita en la lista de salvaguarda que debe existir en patrimonios culturales de Estado y establecidos en la Resolución de la Unesco, artículos 135 y 137 de 2011 que declaran patrimonio inscrito.
Aguilar explicó que el Ministerio de Culturas, Descolonización y Despatriarcalización, la Cancillería del Estado y la Embajada de Bolivia ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés), realizan las acciones pertinentes para el seguimiento y para dar a conocer que esas danzas y expresiones de vestimenta, que son desarrollo de historia, cuentan con resoluciones y leyes del Estado Plurinacional que las reconocen.
Señaló que la reivindicación de los patrimonios culturales es construida a lo largo de la historia y reclamados a través de la misma.
“En el caso de la Morenada, es una expresión cultural construida por el carnaval de Oruro y la festividad del Gran Poder que reconstruyen esta historia; como el sonido de la matraca, que representa el arrastre de las cadenas, la pesadez del valle por el traslado de mineral, trabajo duro, etc”, expresó.
Aguilar remarcó que la historia de las danzas no puede ser modificada porque la construcción fue realizada por el sentir y vivir de las personas que decidieron crearla para representar el sentimiento reflejando a través de los años que forman parte de su cultura.