Brasilia, 30 de mayo de 2023 (ABI). – El presidente Luiz Inácio Lula da Silva fue el anfitrión de la remozada Cumbre de Presidentes de América del Sur que acordó en Palacio de Itamaraty formar una instancia de coordinación del más alto nivel para trazar una hoja de ruta y definir acciones destinadas a enfrentar los actuales desafíos en bloque.
Así lo informó Arce al final del encuentro del que también participaron los mandatarios de Argentina, Alberto Fernández; de Chile, Gabriel Boric; de Colombia, Gustavo Petro; de Ecuador, Guillermo Lasso; de Guyana, Irfaan Ali; de Paraguay, Mario Abdo Benítez; de Surinam, Chan Santokhi; de Uruguay, Luis Lacalle Pou; y de Venezuela, Nicolás Maduro, además del titular del Consejo de Ministros del Perú, Alberto Otárola.
“Hay una propuesta concreta de que cada país delegue un representante presidencial para que se genere una agenda mucho más efectiva, mucho más concreta y que se establezcan acciones para que los países podamos, luego, en una próxima reunión, aprobarlos y empezar a ejecutar estas acciones que nosotros estaríamos adoptando”, explicó en Bolivia Tv.
Arce calificó de positivo el encuentro propiciado por el presidente brasileño y la consideró una “etapa inicial” de una futura “coordinación de políticas y acciones entre todos los países de Unasur (Unión de Naciones Sudamericanas)”.
Y para alcanzar resultados inmediatos, propuso en la deliberación de los mandatarios “corregir y cambiar lo que sea necesario” para reimpulsar a la Unasur, cuya última cumbre de jefes de Estado fue en 2014, en Ecuador.
Ahí la importancia del encuentro que impulsó Lula Da Silva y del que Arce dijo permite “discutir cómo fortalecer nuestro proceso de integración, cómo mejorar las potencialidades que tenemos y cómo utilizarlas para poder generar políticas comunes que favorezcan a nuestros pueblos”.
“El presidente Lula propuso 10 políticas para mejorar, muy concretas, y muchos presidentes hemos aportado en lo que significarían los pasos que tendríamos que seguir, las acciones que deberíamos tomar como países de la Unasur para fortalecer este proceso integrador entre nuestros países, por una parte; pero más importante es generar acciones con resultados para favorecer a cada uno de los países”, consideró.
Arce propuso aprovechar las potencialidades de la región para responder a las distintas crisis que enfrenta el planeta como la energética, la alimentaria y la hídrica.
“América Latina es una potencia en la producción de energía, América Latina es una potencia en la resolución del problema hídrico, América Latina y América del Sur es una potencia para resolver el problema energético renovable y, por lo tanto, es una oportunidad para nosotros como países de poder entendernos”, reflexionó.
Sostuvo que la fortaleza de la región reside en la unidad de los países por encima de las diferencias ideológicas.
“No podemos negar que hay diferencias entre los gobiernos, pero los intereses de la población de América del Sur son uno solo, todos quieren progreso, todos quieren desarrollo, todos quieren mejorar la calidad de vida y creo que los gobiernos estamos obligados a trabajar en esa institucionalidad que nos permita darle ese beneficio a toda la población de América del Sur”, afirmó.
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